PUEBLOS NEGROS DE GUADALAJARA EN UN FINDE

Andábamos ya con un poco de mono de salir de Madrid, de paseos, naturaleza y como no, homenaje culinario así que la semana pasada preparamos calzado cómodo y nos fuimos de rutilla por los Pueblos negros de Guadalajara, a los pies del Pico del Ocejón.
Estos pueblos se denominan de la Arquitectura Negra porque el material que predomina en todas sus construcciones es la pizarra, por lo que allí nos encontramos puentes, Iglesias, fuentes, viviendas construidas con ese material. Además, las nuevas edificaciones se han hecho respetando el estilo característico de la zona, con lo que el resultado es un tono general negro que contrasta maravillosamente con los colores de las flores que adornan muchos de sus balcones, convirtiéndose en un destino ideal para los amantes de la fotografía. Los Pueblos Negros también harán las delicias de los senderistas ya que en la zona se encuentran varias rutas de distintos grados de dificultad, pero todas ellas igualmente interesantes.
Por todo esto en los últimos años han proliferado un montón de casas rurales ideales para un completo finde donde podréis disfrutar de buenos paseos, senderos, chapuzones, de su rica gastronomía…y volver a Madrid con la tarjeta de memoria repleta de fotos preciosas y la memoria cargada de recuerdos inolvidables.
RUTAS
Para visitarlos podemos elegir dos posibles rutas desde Tamajón.
1.- Almiruete, Palancares y Valverde de los Arroyos
Valverde es en mi opinión el pueblo más bonito de la Arquitectura Negra (allí además de la pizarra también usan la cuarcita), y el que tiene más vida, con una variada oferta de restaurantes, tiendas de artesanía, casas rurales, un museo etnográfico, su Iglesia de San Ildefonso, construcciones de dos plantas y una plaza con su fuente también de pizarra. Además, desde allí parten dos de las rutas más valoradas por los amantes del senderismo: la Chorrera de Despeñalagua de 120m (dificultad baja, sin apenas desnivel, 5km ida y vuelta en una hora y media aproximadamente) y el Pico del Ocejón, a 2049m sobre el nivel del mar (unos 13 km en 6 horas aproximadamente con 800m de desnivel, dificultad media-alta).
Verano, más de 30 grados. Sí, soy una rajada, hicimos la de la Chorrera, un paseín con unas vistas espectaculares donde lo de menos fueron las cascadas, que al ser verano no tenían mucho caudal.
En cuanto a la oferta gastronómica la mejor opción es el asador Los Cantos.
2.-Ruta que va desde Tamajón pasando por Campillejo, el Espinar, Roblelacasa, Campillo de ranas y Majalrayo
De todos ellos Campillo de ranas es el más importante. Campillo además se hizo especialmente popular ya que fue el primer pueblo en celebrar una boda gay en España y desde entonces es el lugar elegido por muchas parejas para casarse.
Tanto en Campillejo como en el Espinar destacan su Iglesia, la de Campillejo recientemente reformada. Desde Roblelacasa sale un sendero de 3km (fácil, sin apenas desnivel) en el que podréis encontrar el pueblo abandonado de Matallana a medio camino y la cascada del Aljibe y sus pozas, un bonito doble salto donde si el tiempo acompaña os podréis dar un buen chapuzón. En Campillo de Ranas no os perdáis su reloj solar junto a la Iglesia de Santa Magdalena, el mirador de las Ranas y el Roble Hueco, más viejo que los caminos. En Majaelrayo destacan sus fuentes, los baños de Robledo con sus propiedades curativas y la Iglesia de San Juan Bautista, de construcción más moderna. Allí, y con un vecino de la localidad se grabó el famoso anuncio del Mitsubishi Montero, aquel de «y el Madrid que, otra vez campeón de Europa?».
Pero en todos los pueblos de esta ruta, os aconsejo pasear pasear y pasear sin rumbo.
Más
Desde Majaelrayo pasando por Cantalojas llegamos al Parque Natural del Hayedo de la Tejera Negra, que os recomiendo visitar en otoño por sus colores, el musgo de sus suelos y sus deliciosos boletus. Para ello deberéis reservar el aparcamiento en https://hayedotejeranegra.castillalamancha.es
Además, desde Majaelrayo parte un sendero de 15km que nos llevará al Pico del Ocejón en unas 6 horas, una subida durilla entre enebros, hayas y robles, con unos 900m de desnivel.
En cuanto a su oferta gastronómica en esta ruta encontraremos restaurantes como Los Manzanos en Campillejo o la Fragua en Campillo de ranas (en este último la verdad es que no pudimos comer mejor, de menú, eso sí) . Tampoco tendréis problema en encontrar alojamiento en cualquiera de sus bonitas casas rurales : Cerezas y Miel o la Casa del Ocejón en Majaelrayo, Aldea de la Tejera Negra en Campillo de ranas, La Pizarra Negra o el Roble Hueco en Campillejo.
Ah, y en el camino de vuelta podéis hacer una parada en el pueblo de Tamajón (con su Ciudad Encantada, la ermita de los Enebrales y la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción) y en las ruinas del Monasterio cisterciense de Bonaval de 1164 (a 2km de Retiendas).
En fin, plan casi perfecto para un finde inolvidable. El problema de esos pueblos es el de La España vaciada, pero eso ya forma parte de otro debate. Mañana me toca Zenith, muchasss ganass!!. Mua!
Excelentes recomendaciones para disfrutar de los pueblos negros de Guadalajara en un finde. La verdad es que es una escapada muy recomendable, especialmente desde la capital o algún sitio cerca. Me alegra que disfrutaras el viaje. Un saludo.